Comentario
La solidez de la maquinaria administrativa heredada no exigió a Trajano más que intervenciones destinadas a seguir manteniéndola con un alto grado de eficacia. Pero, por primera vez, se advierte un intento de utilizar el aparato administrativo para equilibrar la desigualdades entre Italia y las provincias, sin distinción entre las orientales y las occidentales.
La época flavia había estado marcada por el mayor peso económico y social de las provincias occidentales frente a Italia y Oriente. Trajano toma medidas para frenar el declive de Italia; la institución de los alimenta inaugurada por Nerva adquiere su pleno desarrollo bajo Trajano. Por las planchas de bronce que nos han llegado (la de Veleia y la de los Ligures Baebiani son expresivas), sabemos que el dinero del Fisco se prestaba con un interés muy por debajo del 5 por 100, de modo que estimulara la aceptación de esos créditos ofrecidos. El éxito del procedimiento se justifica cuando se comprueba que la institución de los alimenta estuvo vigente más de un siglo.
Y para la mejora de Italia fueron igualmente destinadas otras cantidades del Tesoro con las que se pudieron reparar vías o crear otras nuevas -así la via Traiana iniciada el 109- lo mismo que ampliar las instalaciones portuarias de Ostia, que habían quedado reducidas con el primer gran puerto abierto por Claudio. Otra parte de esas inversiones públicas se destinó a mejorar las condiciones de vida de la población de Roma: la creación de un gran Foro que superaba en dimensiones y utilidades a los Foros de César y de Augusto, la ampliación del abastecimiento de aguas a la ciudad con el nuevo acueducto trajaneo, aqua Traiana, y otras obras menores (biblioteca, basílica...) lo testimonian. En el nuevo Foro fue erigida la gran columna de Trajano, que relata en bajorrelieves las hazañas militares de las guerras que condujeron al sometimiento de la Dacia. Se comprende así la emisión de una moneda del 108 con la leyenda Italia restituta.
Pero la intervención imperial se manifestó también en numerosas obras públicas realizadas en las provincias. La atención a la mejora y ampliación de la red viaria no tenía sólo fines militares, ya que las vías se utilizaban también para el correo, cursus publicus, y para el tráfico de mercancías. Y si del extremo occidental se pueden mencionar la pavimentación de largos tramos de la Vía de la Plata que unía (Sevilla)-Mérida- Astorga, de mejoras en la Vía Hercúlea que iba de los Pirineos a Cádiz y de otras vías dirigidas a unir las diversas ciudades con las capitales provinciales, se encuentran igualmente testimonios de su atención a las vías de la Galia, del Danubio y de Oriente. Indicativa de esta política es la construcción de la vía que unía el Mar Rojo, desde el actual puerto de Aqaba en Jordania, con las ciudades del interior como Gerasa después de atravesar el desierto; la creación de esta vía puso nuevas bases para el comercio caravanero y dejó marginada a la ciudad nabatea de Petra, la que monopolizaba gran parte de este comercio hasta ahora. La población de esta ciudad que no se integró en el nuevo modelo comercial vivió del bandidaje durante los primeros años, hasta abandonar finalmente la ciudad.
En la nueva administración de Trajano dejó también de haber privilegios provinciales. Dacia con la creación de Sarmizegetusa, Africa con Leptis, Hadrumetum y Thamugadi, Tracia con la nueva Traianopolis, son algunos ejemplos de sus fundaciones coloniales en áreas muy diversas del Imperio.
Las deficiencias administrativas de algunas ciudades fueron resueltas con el envío de curatores, expertos administradores para poner en orden el estado de las finanzas municipales. La correspondencia de Plinio el Joven, siendo gobernador en Asia Menor, con Trajano ofrece una información preciosa sobre la agilidad de comunicación entre el emperador y sus legados así como sobre la intensa actividad edilicia de la época. No fueron excepcionales medidas como la exención de impuestos a ciudades que habían sufrido alguna catástrofe -así, un terremoto en Asia Menor- o que se encontraban en la fase de construir grandes obras públicas; a donde no llegaba el estímulo a los patronos de ciudades para colaborar en estos gastos, lo hacía el Fisco.
Esa política constructiva no mermó la atención tradicional a los gastos militares y a los destinados al mantenimiento y diversión de la plebe de Roma. Durante su gobierno hizo tres repartos extraordinarios de dinero, congiaria. Más aún, suprimió la práctica del aurum coronariam, impuesto extraordinario pagado por las ciudades del Imperio con ocasión de la coronación de los emperadores. ¿Cómo explicar esta política sin incremento de impuestos y con dificultades económicas en los inicios de su gobierno? Los resultados de sus campañas militares y los éxitos de su política económica están en la base.